Bloque 1 – Lenguaje, lengua y comunicación oral
El lenguaje humano se
constituye de muchos signos y combinaciones de estos que, incluso, en distintos
momentos y mediante la realidad que acontezca, estos tendrán un sentido u otro
para quienes lo perciban. Por lo tanto, el lenguaje, facultad innata del ser
humano, es un medio para organizar, percibir y delimitar la realidad
atribuyendo nombres y calificativos a esta, con sus objetos, seres vivos,
sentimientos y emociones y, a su vez, clasificando y dividiéndola en grupos y
subgrupos.
Si por un lado el
lenguaje es el medio para que el ser humano pueda pensar y reflexionar,
expresarse personal y comunitariamente, también se torna en un suporte
básico de la memoria, dado que muchas manifestaciones culturales de
civilizaciones anteriores fueron pasando de generación en generación.
Esta capacidad se
concreta en las lenguas. Cada estado, cada población puede tener su propia
lengua o lenguas, su propia concreción del lenguaje que, en suma, son bienes
culturales que deben ser preservados y sostenidos. Para ello, se sirve de
señales y signos que informan y establecen relaciones con otros objetos y su
significado, permitiéndonos comprender y entender dicho objeto o aspecto.
Todo esto sucede en un proceso de
comunicación, pues sin ello no tendría sentido. En este proceso hay un emisor
que busca transmitir un mensaje a un destinario, que denominamos receptor.
Ambos tendrán que ser capaces comunicar en un mismo código tanto para emitir
como para recibir e interpretar el mensaje. Por último, hay que tener en cuenta
el canal, medio por lo cual el mensaje es enviado del emisor al receptor.
“La competencia comunicativa es la capacidad de
una persona para comportarse de manera eficaz y adecuada en una determinada
comunidad de habla”, esto
conlleva a conocer y entender, respetar y dominar diversas normas a nivel
gramatical, de léxico, fonética, semántica y, también, a nivel sociohistórico y
cultural.
En el desarrollo del
niño, el proceso de adquisición y desarrollo del lenguaje es un proceso en el
cual el niño debe incorporar e integrar
una serie de estructuras lingüísticas propias de su lengua que para que se
consoliden, para ello, es necesario que disponga de una serie de estructuras
biológicas, psicológicas y ambientales idóneas. Teniendo esto en cuenta, la
escuela tiene la responsabilidad de crear los espacios y tiempos donde el
alumno pueda integrar y desarrollar su lenguaje.
La comunicación oral se
desarrolla por medio de la expresión y la compresión oral. No es objetivo de la
Educación Primaria hacer con que sus alumnos sean oradores perfectos, sin
embargo, este horizonte habrá que estar presente de manera a que les sean
proporcionadas experiencias y momentos donde practicar la oralidad. De esta
forma, se pretende que los alumnos se comuniquen, hablando y escuchando, entre
ellos y/o con distintas personas, de una forma más motivadora y estimulante.
Pienso que para trabajar
la expresión y comprensión orales es fundamental la práctica de la escucha
activa y el respeto, dada de la mano con la capacidad de empatía y no-juicio
hacia las ideas y gustos de otros. Con base a esto, podemos concluir que es
fundamental, por parte del maestro, el cuidado de las relaciones
interpersonales y el intento de crear un ambiente de confianza en clase.
Bloque 2 – Comunicación escrita: la lectura
La escritura amplia nuestras
formas y posibilidades de comunicación que ya había empezado con la oralidad.
Aquí, entre leer y escribir son actos diferentes
que abren puertas a la reflexión, relación y expresión personal y con otros.
Centrándonos en la
lectura, uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es que esta es
un proceso, no solo de descodificación sino también de interpretación,
comprensión, relación y decisión que lleva al lector a ampliar sus
conocimientos y a adquirir ideas y valores fundamentales. Por ello, al ser un
proceso, a la hora de proponer y trabajar con los niños, como maestro tendremos
de partir de motivaciones reales más allá de un mero aprobado en un examen o la
superación de una simple prueba. Así siendo la lectura se experimenta en la
tensión entre la necesidad y el placer de aprender y expresarse.
Al lector se le exige
atención, hacia el texto, la postura, mirada; memoria, en cuanto medio para
relacionar los diversos contenidos de las lecturas efectuadas; capacidad de comprensión
de manera a ser capaz de construir significado sobre lo leído; capacidad de
inferir, sacar una consecuencia o deducir
algo de otra cosa.
Entre los distintos
métodos que buscan el aprendizaje de la lectura, hay que destacar que este
mismo aprendizaje tendrá que ser significativo y emotivo para el alumno de modo
a que este comprenda y sea capaz de interpretar la realidad a su alrededor.
Aquí reside otro desafío
para el maestro: ¿cómo conectar y acompañar a mis alumnos en este proceso de
lectura?
Pienso que este proceso a
que nos referimos empieza, en parte, por el ejemplo. Si un alumno siente el
entusiasmo y placer de su maestro hacia la lectura es probable que la
curiosidad provoque el inicio de la lectura. Por otro lado, siento que como
maestro tengo la tarea de yo mismo leer aquello que propongo, es decir, yo
mismo intentar entender y comprender los gustos y lectura de interés de mis
alumnos.
Bloque 3 – Comunicación escrita: la escritura
Como en los bloques abordados
anteriormente, la escritura se torna esencial para la interpersonal del
individuo o como grupo social. Escribir permite usar la lengua en diversas
situaciones y formas. De cierto modo, posibilita y capacita al hombre
establecer lazos con otros.
Una de las cuestiones que
se presentan son los métodos empleados para el aprendizaje de la escritura. La
adquisición de las letras, la trayectoria de la escritura son aspectos que
están relacionados con factores como los físico-fisiológicos, psico-cognitivos
y socioculturales.
En definitiva, la
escritura se divide en dos procesos fundamentales: el mecánico y de redacción.
El proceso mecánico puede
resultar cuestionable en una sociedad y una escuela donde, cada vez más, los lápices
y el papel son sustituidos por soportes digitales y audiovisuales. Sin embargo,
mejorar en orden, limpieza y claridad las elaboraciones escritas es algo
fundamental en cuanto al entrenamiento de la caligrafía. Este trabajo tiene que
ser, una vez más, motivado de tal forma a que los niños entiendan, acepten y
tomen como propia esta necesidad.
Al mismo tiempo, educar a
nuestros niños en la escritura digital se hace necesaria cada vez más en
nuestros días. En esta cuestión, también es tarea del maestro orientar,
gestionar y proporcionar tiempos y actividades para que puedan entrenar todo
esto con cierto equilibrio y compaginar las dos formas de escribir.
Cuanto a redactar, son
muchas las actividades, estilos de texto, etc. a que el niño leerá y, también,
escribirá. Aprender a redactar exige cierta disciplina y un uso muy variado de
la lengua. En este acto el maestro lleva a cabo su trabajo de una forma
continuada y sistematizada, de manera a que los alumnos puedan ir asimilando las
distintas estructuras, técnicas y esquemas implicados.
Bloque 4 – El sistema de la lengua: ortografía y semántica
¿qué hacer ante un “conjunto de normas que rigen la representación
escrita, código gráfico de la lengua” como la ortografía? o ¿un “estudio del significado y la interpretación de los signos lingüísticos,
atendiendo también al significado de frases hechas, expresiones habituales,
figuras expresivas relativas significado y construcciones diversas en un contexto
determinado” como la semántica?
Algo aparentemente
aburrido, incapaz de conectar con los alumnos…Sin embargo, trabajar este bloque
resultó ser “entretenido”.
Lógicamente, y esta
podría ser una de las conclusiones de esta asignatura, siempre necesitamos una
base, algo en que asentar los conocimientos, pero eso se puede conseguir con
otras actividades, otras formas y caras.
Ese fue uno de los
hallazgos en este bloque: las distintas perspectivas y modos plantear un
dictado, las actividades ludo-didácticas para trabajar la ortografía y semántica.
Bloque 5 – El sistema de la lengua: morfología y sintaxis
En la misma línea que en
el bloque anterior, los contenidos y la tarea propuesta del bloque cinco me
permitió observar y buscar las distintas actividades propuestas en la web. Para
mí fue una toma de consciencia de cuanto se está trabajando de manera a ofrecer
un trabajo de la morfosintaxis de una forma más lúdica, entretenida pero
correcta y objetiva en los contenidos abordados.
Conclusión
Al terminar esta
asignatura, siento que pude asentar algunas bases más en mi conocimiento y uso
de la lengua castellana. Como he ido refiriendo a lo largo de estos meses, me
resultó interesante estudiar Castellano desde esa doble mirada de maestro y
alumno, donde sentí necesidad de parar, ejercitarme y recordar cómo había
aprendido uno u otro aspecto. También, fue interesante para mí comparar o hacer
paralelo entre el portugués y el español pudiendo imaginarme la adaptación y
traducción de las distintas actividades que fui conociendo.